Motivación inconsciente Perspectiva psicoanalítica El psicoanálisis es determinista al considerar a que afirma que la causa ultima de la motivación y la conducta deriva de impulsos heredados biológicamente y adquiridos socialmente, los cuales determinan nuestros deseos, pensamientos, sentimientos y comportamientos, nos guste o no. Muchos impulsos motivacionales de un adulto pueden rastrearse en situaciones que tuvieron lugar en la infancia. El psicoanálisis también es en verdad pesimista, incluye urgencias sexuales y agresivas, conflictos, represiones, mecanismos de defensa, deseos inconscientes, ansiedad y otras cargas, vulnerabilidad y deficiencia de la naturaleza humana. Todos somos obstinados con la culpa; la ansiedad es nuestra compañera, el narcisismo y la homofobia son demasiados comunes, y las distorsiones de la realidad son modus operandi. No es un cuadro agradable, dijo Freud, pero, no obstante es real. En su opinión no fue pesimista; fue realista. El psicoanálisis ofrece una oportunidad para hablar acerca de lo que podría ser quizás la materia de estudio más interesante de todas: el contenido de nuestra propia experiencia subjetiva privada y el porqué de qué los deseos y los temores desagradables se refugien ahí. Lo psicoanalítico se vuelve psicodinámico. El término psicoanalítico se refiere a los practicantes que siguen fieles a los principios freudianos más tradicionales, mientras que el término psicodinámica se refiere al estudio de los procesos mentales inconscientes dinámicos. En otras palabras, uno puede estudiar los procesos mentales inconscientes (por ejemplo, prejuicio, depresión, supresión del pensamiento, mecanismo de defensa) dentro o fuera de la tradición freudiana. Teoría de Freud de la dualidad instintiva. La fuerza propulsora para las energías física y mental es la pulsión biológica (o instinto), que es una fuerza involucrada biológicamente que” emana del organismo y penetra en la mente”. Freud consideraba que la motivación emergía de las exigencias corporales instintivas. Subrayo dos categorías generales: los instintos de vida y los de muerte. Los instintos de vida (eros) mantiene la vida y asegura la supervivencia individual y colectiva (aire sueño, agua, sexo, nutrición y afiliación (búsqueda de placer). La segunda clase de instintos (thanatos) empuja al individuo hacia el descanso, la inactividad y la conservación de la energía. Dio importancia a la agresión. Cuando se enfoca en el yo, la agresión se manifiesta como autocrítica, sadismo, depresión, suicidio, masoquismo, alcoholismo, adicción a las drogas, etc. Cuando se centra en los demás, se manifiesta como ira, odio, prejuicios, insultos verbales, crueldad, rivalidad, venganza, asesinato y guerra. Mediante la experiencia que en esencia es un sinónimo del desarrollo psicosexual, el individuo aprende a reacciones defensivas para manejar su energía sexual y agresiva. La forma aprendida de defensa habitual de la persona es en gran parte lo que Freud conceptualiza como ego. Por lo tanto, las ilusiones instintivas proporcionan la energía para la conducta, mientras que el ego da su dirección: lograr la satisfacción de la necesidad en la forma socialmente más adaptativa, socialmente más apropiada y que menos ansiedad provoque.
Se entiende la motivación como una función de los instintos biológicos para los freudianos. Homeostasis necesidad Consumación
pulsión
conducta dirigida a la meta retorno a la homeostasis
Actualmente se sustituye por “modelo del deseo”. Son los deseos y no las pulsiones as que dirigen la conducta humana. El deseo retine todo el espíritu de la motivación freudiana pues la gente con demasiada frecuencia desea todo para los estados deseados en los terrenos sexual y agresivo, pero supera la evidencia contradictoria de que el sexo y la agresión no funcionan como pulsiones fisiológicas. Con los deseos, la motivación surge de pensamientos que emanan de problemas para la adaptación exitosa a los entornos y a las relaciones interpersonales de uno. Actualmente los psicoanalistas contemporáneos invierten su tiempo analizando las fuentes de deseo cognitiva social y personal, las cuales pueden explicar fenómenos como el suicidio, el alcoholismo, masoquismo, comilonas, fanatismo religioso entre otras forma similares de enfrentarse y adaptarse a la vida. El enfoque contemporáneo en definitiva ha convertido lo interpersonal en su centro para ayudar a la gente a reconocer, mejorar o escapar en forma inequívoca de estilos y relaciones interpersonales problemáticas. Teoría psicodinámica contemporánea. Cuatro postulados definen a la teoría psicodinámica. 1. Gran parte de la vida mental es inconsciente. Argumenta en forma destacada que los pensamientos sentimientos y deseos existen en el nivel inconsciente. 2. Los procesos mentales operan en paralelo entre ellos. Menudo las personas quieren y temen lo mismo. 3. El desarrollo saludable implica cambiar de una personalidad inmadura, socialmente dependiente a un que es más madura e interdependiente. Es decir el desarrollo del ego. 4. Las representaciones mentales del yo, de los otros y de las relaciones forman en la niñez aquello que guía las posteriores motivaciones sociales de la gente. Teoría de la relación de objeto. Una vez formadas, tales creencias acerca del yo y de los otros le dan forma a los estados motivacionales y guían el curso de las relaciones interpersonales de uno. El inconsciente Incluyendo la hipnosis, la asociación libre, el análisis de los sueños, el humor, las pruebas proyectivas, los errores y los lapsus orales y los llamados “accidentes”. El inconsciente freudiano es listo debido a su asombrosa habilidad para ayudar al individuo adaptarse con éxito a las exigencias del mundo. Sin embargo la visión más contemporánea es que el inconsciente es tonto, simple y automático y realiza solo procesamientos rutinarios de información. El ego se convierte en el proceso ejecutivo, la censura inconsciente se convierte en el filtro, el conflicto se transforma en modos de decisión, la consciencia torna en memoria de trabajo, etc. Inconsciente freudiano Además de servir como válvula de escape los sueños sirven como:
a) b) c) d)
Una función de desahogo neurofisiológico Una función que consolida la memoria Una función de protección contra el estrés ( enfrentamiento) Una función para solucionar problemas
Psicodinámica La gente tiene ideas y deseos, pero también contra ideas y contra deseos. Cuando el deseo consciente (del ego) y el contra deseo inconsciente (del id) son de una intensidad aproximadamente igual, se establece una especie de guerra civil interna en la cual ninguno de los dos se satisface por completo. Los combatientes se esquematizan del modo siguiente: Deseo
contra deseo
A este choque de fuerzas es el término psicodinámica. Para Freud las motivaciones de id inconsciente, involuntarias y dirigidas por el impulso y hedonistas, que el id obedece al principio del placer: obtener placer y evitar dolor, y hacerlo a cualquier precio sin dilación. Las motivaciones del ego eran en parte consciente y en parte inconsciente sumido en defensas e intentan retrasar la satisfacción ya que el ego obedece al principio de la realidad: retrasa la búsqueda de placer hasta que pueda encontrarse un objeto que satisfaga la necesidad de una manera apropiada, oportuna y socialmente aceptable. En la actualidad los psicoanalistas señalan que los deseos, temores, valores, metas, emociones, pensamiento, y motivos nunca están armonía, así que el conflicto mental es una constante inevitable. Represión Freud consideró al inconsciente como un departamento demasiado saturado, al consciente como una sala de recepción para el mundo público y a la represión como un portero metafórico que verifica cada una de las tarjetas de identificación de los pensamientos inconscientes para juzgar si fueron invitados a la consciencia. La represión y la resistencia constituyen los fundamentos de la psicodinámica. La represión se refiere al proceso de olvidar información o una experiencia por medios inconscientes, no intencionales y automáticos. (La supresión por el contrario se refiere al proceso de eliminar un pensamiento de la atención mediante formas que son conscientes intencionales y deliberadas.
Psicología del ego Freud vio al ego como una estructura de la personalidad que surge de las energías del id, para mediar entre los impulsos del id, las exigencias del superego y los peligros del ambiente. El id es la fuerza, el ego se vuelve la contrafuerza. Los neo freudianos pensaron que el ego era mucho más, Heinz Hartmann “el padre de la psicología del ego”, consideró que el ego se involucra en un procesos de maduración que le hace cada vez más independiente de sus orígenes del id. El ego a diferencia de id, se desarrolló mediante el aprendizaje y la experiencia.
El ego pasa por etapas: Simbiótico Impulsivo Auto protector Conformista Consciente Autónomo Fortalecimiento del ego 1. Un ego maduro y fuerte se manifiesta en tres formas: 2. Mecanismos de defensa con rápida recuperación que le permitan enfrentar con éxito las inevitables ansiedades de la vida. 3. Un sentido de efectividad o competencia que le proporciona una capacidad generativa para buscar y dominar (maestría) los desafíos óptimos y para desarrollar nuevas habilidades 4. Un sentido de identidad que el proporciona un productivo y satisfactorio lugar dentro de la sociedad. Defensa del ego El ego se protege contra los potencialmente agresores niveles de ansiedad que originan a partir de los conflictos con impulsos del id. Negación formación reactiva Fantasía regresión Aislamiento desplazamiento Represión racionalización Identificación expiación Proyección compensación Humor sublimación Teoría de la relación de objeto El énfasis en la necesidad biológica por la satisfacción sexual dio paso a la necesidad psicológica de gregarismo. La necesidad de vínculo del infante con el cuidador resulta central en la teoría de las relaciones de objeto ya que es la conexión interpersonal del individuo con toda la gente importante en su vida. Objeto es el blanco hacia el cual se dirigían las pulsiones del individuo para su satisfacción. Se traduce en: a. La necesidad de estar en relación con otros b. El modo en que los objetos se representan mentalmente c. La calidad de las relaciones interpersonales de uno La teoría de la relación de objeto se centra en la naturaleza y el desarrollo de las representaciones mentales de yo y de los otros, así como en los proceso afectivos (deseos, temores) asociados con estas representaciones.