RESTOS CADÁVERICOS GENETICA FORENSE
¿QUE SON LOS RESTOS CADAVERICOS? Descomposición humana
Estados: Fresco Hinchado Putrefacción activa Putrefacción avanzada Seco o de restos
autolisis y putrefacción
Embalsamamiento
Momificación
Retardo de descomposición
Proceso de descomposición química
DESCOMPOSICIÓN La descomposición es
un proceso común en biología y química. En biología, el término descomposición refiere a la reducción del cuerpo de un organismo vivo a formas más simples de materia.
TIPOS CADÁVERES EN BUEN ESTADO DE CONSERVACIÓN. SANGRE post-mortem: 200 microlitros (anticoagulante
tipo EDTA), colocar sobre papel de filtro. MUSCULO ESQUELETICO: Aprox 1 gr. Se almacena en un recipiente de plástico y tapón de rosca. Conservar en freezer. PIEZAS DENTALES: 2 (molares). Dejar en reserva a temperatura ambiente, con el fin de evitar la exhumación si se requieren estudios de ADN meses o años después. TÉCNICAS DE MUESTREO Tejido muscular sin líquido fijador en frasco de boca ancha y tapón de rosca.
En los casos que sea posible se dará preferencia a
muestras sanguíneas obtenidas por punción cardiaca. Rotular la tarjeta FTA con los datos identificatorios y colocar varias en el círculo disponible sin superponer las mismas y evitando el exceso. Dejar secar al aire. Una vez seca doblar y ensobrar rotulando el sobre con los datos de la causa y la descripción del contenido. Cuando la muestra de sangre no pueda ser obtenida se procederá a la toma de fragmentos de unos 10 gramos de peso de músculo esquelético de la zona mejor conservada o músculo cardíaco. Los fragmentos se colocan en un recipiente plástico con cierre hermético agregando alcohol etílico 96° como conservador y embalado de acuerdo a como se describe más adelante .
CADÁVERES EN AVANZADO ESTADO DE PUTREFACCION O ESQUELETIZADOS
CADÁVERES EN AVANZADO ESTADO DE PUTREFACCION O ESQUELETIZADOS
HUESO LARGO: Fémur, húmero… PIEZAS DENTALES: 2 (molares). No dañados
externamente ni sometidos a endodoncias. TÉCNICA DE MUESTREO Hueso largo (limpio sin putrílago) y dientes (2 molares).
Muestras de esternón: Tomar fragmentos de las zonas de
cartílago y colocar en frascos plásticos con cierre hermético de tamaño adecuado. Cubrir totalmente la muestra con sal gruesa o alcohol. Huesos largos (ej fémur, tibia, húmero): Tomar un fragmento de hueso que incluya la epífisis y parte de la diáfisis, respetando la dimensión de la muestra. Proceder al envasado de respetando las instrucciones del punto anterior . Piezas dentarias: Al menos cuatro piezas que no estén extremadamente dañados ni presenten amalgamas u otros tipos de endodoncias, dando preferencia a los molares. Colocar en frascos plásticos con cierre hermético de tamaño adecuado sumergidos en alcohol y envasar respetando las normas vigentes.
CADÁVERES TOTALMENTE ESQUELETIZADOS 1- Piezas dentarias y huesos largos. 2- Vértebras u otras piezas óseas. Lavar las muestras con agua retirando la
tierra y/o adherencias, lavar con alcohol, secar al aire y envasar.
CADÁVERES QUEMADOS O PARCIALMENTE CARBONIZADOS
CADÁVERES QUEMADOS O PARCIALMENTE CARBONIZADOS Cuando la carbonización no es total es posible
analizar MÚSCULO ESQUELÉTICO de zonas profundas. Cuando la carbonización es total, es recomendable recolectar huesos o dientes, seleccionando aquellos que a simple vista se encuentren en mejor estado. De existir dudas, ar con el laboratorio. TÉCNICA DE MUESTREO Músculo esquelético de zonas menos afectadas sin líquido fijador y en frasco de boca ancha y tapón de rosca.
En cadáveres en los que la carbonización no
es total, el análisis de ADN puede llevarse a cabo a partir de fragmentos de músculo esquelético de zonas profundas, de la sangre semisólida que permanece en el interior de las cavidades cardíacas, o de piezas dentales ya que son altamente resistentes a la temperatura.
Restos cadavéricos embalsamados
Restos cadavéricos embalsamados. Normalmente son los casos que entrañan la
mayor dificultad puesto que lo más común es que la conservación del cadáver se realice mediante formol ó derivados y está demostrado que el formol produce grandes modificaciones de los ácidos nucleicos.
Restos cadavéricos momificados.
Restos cadavéricos momificados. En ciertos cadáveres se producen fenómenos
naturales de momificación como consecuencia de la rápida evaporación del agua del cuerpo, con lo que se detiene el desarrollo de microorganismos y por tanto la putrefacción y por tanto el material genético de los tejidos blandos momificados se preserva en condiciones que permiten su análisis, que en condiciones habituales no sería posible debido a los procesos destructivos del cadáver.
OTRAS MUESTRAS DE REFERENCIA DE INDIVIDUOS FALLECIDOS
En hospitales (muestras de sangre, biopsias
en parafina, o preparaciones histológicas. No utilizar tejidos fijados en formol. Ámbito familiar (peines, maquinillas de afeitar, saliva en sellos o sobres…)
TOMA DE INDICIOS BIOLOGICOS en casos de investigación biológica de la paternidad
Si el presunto padre está fallecido a) Restos óseos o piezas dentales procedentes de la exhumación del cadáver. b) Análisis de muestras biológicas del fallecido existentes en hospitales o en el ámbito familiar. c) Análisis de muestras biológicas procedentes de familiares del fallecido.
Bajo ninguna circunstancia enviar las
muestras embebidas en formol, puesto que se verá afectada seriamente la integridad del ADN para su posterior análisis. De ser requerido el agregado de un conservante a las muestras podrá emplearse ALCOHOL ETILICO de 96°.
En cualquiera de los casos y en la medida de
lo posible, se deberán remitir por lo menos 2 TIPOS DE TEJIDOS DIFERENTES teniendo en cuenta el orden de prioridad detallado para los mismos.
TÉCNICAS
Cuando se produce la aparición de un cadáver o restos
cadavéricos cuya identidad se sospecha pero no se pueda establecer con total seguridad por métodos tradicionales (antropológicos, odontológicos, etc.), se puede recurrir a un estudio genético como complemento ó como única vía posible de identificación. Los exámenes de ADN pueden definirse como una pericia de carácter científico, realizada en muestras biológicas que contengan moléculas de ADN, a través de la cual se determinan perfiles exclusivos de una persona, lo que constituye su ‘huella genética", de modo que la comparación de una evidencia cuya identidad se desconoce, con una muestra de una persona conocida, permite establecer o descartar identidades.
En el ADN existe una región mayoritaria, en la que la
secuencia en que se presentan las bases nitrogenadas es prácticamente idéntica en todos los seres humanos. La existencia de diferencias sustanciales entre el ADN de diferentes personas fue descubierta por Whyman y White en 1980, en ADN con capacidad para "instruir" directamente al ácido ribonucleico (ARN) (mensajero y de transferencia) para que, fuera del núcleo, en el citoplasma, "induzca la producción de proteínas, por lo que se le llama codificante de proteínas’’. Con posterioridad, se descubre que el material de ADN que no posee la capacidad de inducir la producción de proteínas, es decir ADN no codificante de proteínas y cuyas funciones son todavía desconocidas (de ahí que se le ha señalado como "ADN basura"), presentaba como una de sus principales características una gran variabilidad de sus regiones, o lo que es lo mismo, un muy elevado "polimorfismo".
En 1985, Jeffreys y colaboradores "diseñaron
sondas de ADN, denominadas sondas multilocus, que podían determinar muchas de estas regiones hipervariables simultáneamente..." y ". ..Consideraron que estos patrones serían prácticamente específicos para cada individuo, y los denominaron ‘DNA fingerprints’ (huella genéticas de ADN).
En consecuencia, el examen de identificación de
ADN se sustenta en: a) La capacidad de identificar una determinada sección de ADN, dentro del genoma completo; b) La posibilidad de identificar la gran variabilidad de los polimorfismos existentes en esa determinada sección en el ADN de una persona, y c) El establecer una comparación entre los diversos resultados alcanzados, confirmando o excluyendo identidades.
Los exámenes de ADN con utilidad forense
destinados a obtener algún tipo de identificación, pueden perseguir distintos objetivos y por ello presentan diferencias importantes. Entre los principales tipos de exámenes se encuentran los encaminados a determinar paternidad, los que buscan identificar restos humanos y los que permiten identificar delincuentes. Las diferencias esenciales dicen relación con el tipo de ADN que se utiliza, así como con la manera de alcanzar los resultados perseguidos.
Si el objetivo es identificar restos humanos de antigua data,
por un lado, no existirá una huella genética previamente elaborada de aquella persona cuyos restos se pretende identificar y, por otro, el ADN nuclear se encontrará degradado, como resultado de la acción de los microorganismos o de las condiciones del ambiente, o contaminado con sustancias que hacen imposible su estudio. Para estos efectos entonces se extrae ADN mitocondrial, cuyo origen es sólo de línea materna y se compara con el de algún pariente que, al descender de una misma mujer, deba poseer el mismo ADN mitocondrial. En estos casos se seleccionan dos regiones hipervariables y se efectúan las secuenciaciones respectivas, las que luego se comparan. Estas secuencias, sin embargo, teóricamente pueden ser compartidas por decenas, centenares o aun miles de personas. La identificación de los restos entonces se logra mediante un trabajo de aproximación cultural, que permita reducir el número de posibles titulares de esos restos, en conjunto con la comparación de ADN mitocondrial.
El trabajo de identificación de restos óseos
por ADN mitocondrial se está realizando en Estados Unidos y Europa para identificar soldados desaparecidos en guerras pasadas. En América Latina, Chile incluido, para identificar restos de personas detenidas desaparecidas o asesinadas. Tratándose de restos óseos correspondientes a personas muertas hace varias décadas, el trabajo es muy lento, altamente complejo y requiere de personal especializado en esta materia. Para alcanzar resultados indubitados, algunas instituciones como el FBI o el AFDIL han establecido rígidos protocolos.
Zonas no codificantes La técnica RFLP Reacción en cadena de la polimerasa Adn mitocondrial