Rosca Vienesa Ingredientes:
Amasijo Harina 500 grs. Levadura 20 grs. Ralladura de limón 1 Unidad Huevos 100 grs. Azúcar 100 grs. Leche 125 cc Sal 10 g Miel 10 grs.
Bebida sugerida Green chamomile (Té verde)
Empaste Manteca 250 g Harina 0000 125 g
Relleno Cerezas en almíbar 200 g Crema pastelera de chocolate 150 g Glasé Cantidad necesaria Almendras Cantidad necesaria
Procedimiento: Empaste - Mezcle la harina y la manteca hasta formar una pasta homogénea - Forme un rectángulo, envuelva con un film y lleve al frío hasta que quede duro. Amasijo - En un bowl mezcle los huevos, el azúcar, la miel, la leche, la sal, la levadura y la ralladura de limón. - Agregue la harina y mezcle hasta unir los ingredientes. - Amase sobre la mesada enharinada hasta lograr una masa sedosa y suave. - Cubra con un film y deje reposar en la heladera durante 30 minutos. - Estire en forma rectangular y coloque en el centro de ella el empaste frío. - Enciérrelo con la masa y amase hasta alcanzar los 5 mm de espesor. - Doble los laterales hacia el centro y luego encime las partes, esta operación de llama vuelta doble. - Envuelva con un film y lleve al frío durante 2 horas. - Estire con el palote y repita el proceso anterior 2 veces más. - Finalmente estire la masa hasta alcanzar una lámina de 5 mm de espesor. - Pique groseramente las almendras. - Unte la mitas de la masa con la pastelera de chocolate, siembre con las almendras picadas y cubra con la masa libre. - Corte la masa en tiras de 2 cm de ancho y enrolle sobre si mismas, luego enrosque dos bastones y finalmente arme roscas. - Disponga en bandejas enmantecadas, pincele con huevo batido y deje - fermentar al doble de su volumen. - Cocine en el horno precalentado a 190° C durante 15 a 20 minutos aproximadamente. - Deje enfriar las roscas, pinte con glasé y decore con cerezas y almendras picadas.
osca vienesa
Rosca vienesa
3 unidades PARA LA MASA harina 000 cernida 500 g azúcar 100 g levadura de cerveza 30 g yemas 5 esencia de limón 1 cucharadita leche 250 cm3 empaste EMPASTE manteca fría 150 g harina 000 tamizada 75 g PARA EL RELLENO pasta de almendra 250 g azúcar 125 g esencia de vainilla 1 cucharadita clara 1 pasas de uvas negras y rubias 75 g huevo batido para pincelar la masa 1 PARA LA CUBIERTA jalea de frutas 150 g glasé almendras 100 g PARA EL GLASE FLUIDO
azúcar impalpable 150 g esencia de limón gotitas a gusto agua cantidad necesaria.
MASA Formar una corona con la harina. Disponer el azúcar en el centro de la corona. Colocar la levadura de cerveza, las yemas y la esencia de limón en el centro.
Verter parte de la leche sobre la levadura(para disolverla un poco). Mezclar los ingredientes del centro. Incorporar la leche restante y continuar mezclando. Integrar la harina de la corona. Amasar hasta obtener un bollo liso y homogéneo.
EMPASTE Poner la manteca y la harina sobre la mesa. Trozar la manteca para unirla con mayor facilidad a la harina. Trabajar ambos ingredientes hasta integrarlos por completo.
Sobre una superficie enharinada, esturar la masa formando un rectángulo y ubicar el empaste en el centro. Llevar a un lado de la masa sobre el empaste.
Encimar levemente el extremo opuesto. Doblar los extremos de la masa. Disponer la masa con los cierres hacia abajo, sobre una tablar o placa enharinas. Conservar en la heladera hasta que endurezca el empaste.
Retirar de la heladera. Estirar la masa a 50 cm de largo para comenzar con la primera vuelta doble. Tomar un extremo de la masa y llevarlo hacia el centro. Girar la masa y desplazar el extremo opuesto hacia el centro, sin encimarlo al primero.
Girar nuevamente la masa y estirar levemente. Doblar la masa al medio, superponiendo los dobleces, quedando así el doblez doble o en forma
de libro. Llevar a descansar a la heladera sobre una tabla enharinada, con la protección de un papel film, durante 1 hora. Retirar. Estirar la masa a lo largo para comenzar la segunda vuelta doble.
Llevar los extremos de la masa hacia el centro, sin superponerlos. Luego, estirar levemente. Doblar la masa a modo de libro. Estirar ligeramente. Acomodar la masa en una fuente enharinada.
Cubrir con papel film. conservar en heladera hasta el día siguiente. Al otro días, retirar y repetir una vez más la operación. Llevar a heladera por una hora. RELLENO Colocar la pasta de almendras en un bol. Agregar el azúcar. añadir la esencia de vainilla. Mezclar y volcar la clara al mismo tiempo. Trabajar hasta obtener una consistencia cremosa.
Retirar la masa de la heladera. Estirar, sobre una superficie enharinada hasta obtener una tira de 25 cm de ancho x 1,20 m de largo. Untar la masa con el relleno cremoso. Sobre la parte inferior de la masa, dejar un borde libre de 2 cm. Pincelar el borde libre con huevo batido y esparcir las pasas de uva negras y rubias sobre el relleno cremoso.
Dividir la tira de masa en tres porciones iguales. Comenzar a enrollar una de las porciones, partiendo del lado opuesto al pintado con huevo. Enrollar las porciones restantes del mismo modo.
Enmantecar una placa. Cortar cada pieza enrollada por el medio. Comenzar a entrelazar una de las partes partiendo del centro hacia uno de los extremos. Completar el trabajo, entrelazando desde el centro hacia el extemo opuesto.
Vista de los sucesivos pasos para realizar los entrelazados. Tomar una de las piezas entrelazadas. Acercar los extremos otorgándole el formato de una rosca. Después unir la tira inferior de uno de los extremos con la tira superior del extremo opuesto. Llevar la tira inferior por encima de la rosca.
Pasar la punta de la tira por debajo de la rosca. Tomar la última tira libre. Conducirla por debajo del entrelazado. Vista de la rosca terminada.
Con las tiras restantes, armar las otras roscas del mismo modo. Disponer las roscas sobre placas enmantecadas. Dejar levar a tres cuartas partes del volumen. Llevar a horno, a temperatura moderada, por 30 o 35 minutos. Retirar y dejar enfriar. CUBIERTA
Una vez cocidas, retirarlas del horno y disponerlas sobre una rejilla. Comenzar a pincelar la superficie con jalea de frutas previamente calentada. Terminar de abrillantar las roscas con jalea.
Bañar las roscas con glasé. Para terminar, decorar con almendras. GLASE FLUIDO Colocar el azúcar impalpable en un bol. Ir agregando el agua y la esencia de limón hasta lograr una consistencia fluida. Para comprobar la fluidez del glasé, tomar un poco de la preparación con una cuchara y observar que se forme una película casi transparente.
Ingredientes
225 gr. de harina de fuerza (de pan, rica en gluten) ½ cucharilla de sal fina (una cucharilla es equivalente a 5 ml) 30 gr. de azúcar. 8 gr. de azúcar vainillado. 8 gr. de leche en polvo. 14 gr. de levadura fresca de panadería (ó 2 cucharillas de levadura seca de panadería)[*] 1 huevo grande ligeramente batido. 75-100 ml. de agua templada, no caliente (unos 30º C). La cantidad necesaria, yo he necesitado unos 80 ml. Si queda muy pegajosa añadiremos harina poco a poco. 20 gr. de mantequilla reblandecida. 10 gr. de manteca (puede sustituirse por mantequilla/margarina) Huevo batido para pintar antes de hornear. [*] En verano no será necesaria tanta levadura, llegará con unos 8-10 gr. ó 1 ½ de levadura seca. Relleno
30 60 60 55 55
gr. de mantequilla derretida no caliente. gr. de pasas sultanas, hidratadas en ron. gr. de orejones de albaricoque troceados. gr. de almendras picadas. gr. de azúcar moreno.
1 cucharilla de canela molida. 1/8 de cucharilla de nuez moscada. Una pizca de jengibre en polvo (opcional) Glaseado
110 gr. de azúcar polvo (impalpable, lustre, glasé, molido,…) Agua Medio tapón de licor de cerezas (Kirsch) 25 gr. de almendras en láminas.
TE QUIERO CUANDO TE ENFADAS Te quiero cuando te enfadas, me haces reír, me recuerdas a una niña caprichosa. Me gustas porque no eres perfecta, las imperfecciones te hacen interesante y realzan lo bello. Te quiero cuando sólo estás un poco enfadada, cuándo se te va con un simple comentario, cuando es evitable. Cuando te alegra el día una ropa o un cumplido. Te odio cuando no transiges, toleras o permites. Cuando no salen las cosas como TÚ deseas. Ingredientes Dacquoise
80 gr. de avellanas tostadas y troceadas gruesas (en mitades o cuartos) 135 gr. de avellanas molidas. 150 gr. de azúcar glasé. 5 claras de huevo (unos 200 gr.) 50 gr. de azúcar polvo (para levantar la claras) Azúcar glasé para espolvorear (antes y después del horneado) Ganache de chocolate negro para cobertura
300 gr. de mantequilla reblandecida. 320 gr. de chocolate negro al 70% (puede usarse 360 gr. de chocolate con leche). 220 ml. de leche entera. Nota: recomendaría que la dacquoise se preparase en la víspera y la ganache durante la mañana del día siguiente. La ganache a temperatura ambiente tiene la consistencia ideal, blandita y
cremosa, sin embargo está más rica después de haberse enfriado algo. Para tomarla déjese una horita en la nevera antes de tomar, si vemos que está demasiado consistente la retiramos antes.
(1) Si las avellanas son frescas las tostaremos en el horno a 150º C durante unos 10 minutos, retirando las pieles una vez tostadas. Troceamos las avellanas en fragmentos relativamente grandes, en mitades o cuartos. Mezclamos la avellana molida con el azúcar glasé y pasamos la mezcla por un tamiz fino. Reservamos.
(2) En un cuenco grande y con un batidor eléctrico montamos las claras a puntos de nieve. Una vez empiecen a levantarse, incorporamos lentamente el azúcar polvo sin dejar de batir. Añadimos poco a poco la mezcla de las avellanas molidas y azúcar, mezclando suavemente con ayuda de una espátula de plástico. Siempre en movimientos envolventes y de abajo hacia arriba, girando el cuenco mientras mezclamos.
(2) Forramos una bandeja de horno grande o dos pequeñas con papel de hornear y dibujamos dos círculos de unos 24 cm de diámetro. Rellenamos una manga pastelera de boca ancha (nº 12) y formamos dos discos en forma espiral empezando desde el centro del dibujo. Espolvoreamos con las avellanas picadas, 40 gr. cada disco, presionando ligeramente para que se incrusten algo. Espolvoreamos cada disco con un poco de azúcar glasé y dejamos reposar durante 10 min. Precalentamos el horno a 170º C. Pasados esos 10 minutos volvemos a espolvorear con otro poco de azúcar glasé y dejamos reposar otros 10 minutos más.
(3) Introducimos en el horno precalentado a 170º C y horneamos durante unos 35 minutos, hasta que esté ligeramente dorada. Si la hacemos poco se rompería, lo mejor es comprobar al tacto. Como he usado dos bandejas, en la mitad del tiempo de horneado he invertido el orden de las mismas, pasando la inferior a la parte superior y viceversa. Si nos caben en una única bandeja no hay problema.
(4) Dejamos enfriar totalmente antes de despegar para evitar que se rompan. Envolvemos en película de cocina e introducimos en el frigorífico. La dacquoise está más rica si se ha dejado reposar en lugar frío, incluso mucho mejor entre 24 a 36 horas después.
(5) Ganache. La prepararemos el día que la vamos a degustar. (5.1) Retiramos la mantequilla de la nevera para que esté blandita. Reblandecemos en un cuenco para facilitar después su incorporación al chocolate y la cortamos en trocitos pequeños. Reservamos. Troceamos fino el chocolate en un cuenco grande. Hervimos la leche, cuando haya hervido vertemos poco a poco sobre el chocolate, removiendo en forma de círculos con una espátula de plástico o cuchara de madera.
(5.2) Procedemos hasta verter toda la leche, removiendo hasta que se haya disuelto todo el chocolate. Cuando la temperatura de la mezcla haya bajado de 60 º C, unos 50-55 ºC, añadimos la mantequilla poco a poco, mezclando con mucho cuidado hasta que se haya disuelto del todo. Reservamos hasta que tenga cierta consistencia y pueda ponerse en una manga pastelera. Si se endurece (en esta época no es muy común) podemos ponerla al baño María o en el microondas sin trabajarla demasiado.
(6) Ponemos un disco de la dacquoise sobre la bandeja en la que se va a servir con el lado de avellanas hacía abajo. Con ayuda de una manga pastelera de boquilla grande (nº 15) (personalmente, pienso que con una del 12 es más que suficiente) formamos bolas que vamos situando desde el borde hacia el centro. Cubrimos toda la superficie y apoyamos el otro disco sobre la ganache con la capa de las avellanas hacia arriba. Dejamos enfriar de 30 minutos a una hora en el frigorífico antes de servir. Cuando la vayamos a servir la espolvoreamos la superficie abundante azúcar glasé. Como he dicho, podemos dejarla a temperatura ambiente para que la ganache esté blandita. Una riquísima tarta que debe tomarse en su justa temperatura… Ave, avellana.