La fe y el compromiso moral. Flecha Andrés, José Román. Teología moral fundamental. Cap. IV.
• Oscar Ernesto Palma Rizzo • Juana Margarita Perez • Hairo Edmundo Escobar Cartagena
Partimos de una concepción básica, subrayada por la encíclica Veritatis splendor: la que afirma la impensabilidad de un buen esquema moral sin una buena fundamentación antropológica. El deber moral se basa en la verdad última del ser humano. Tal concepción no necesita mucho para ser «bautizada»: la moral cristiana remite necesariamente a la seriedad y el gozo de la nueva realidad cristiana amanecida con la fe en Jesucristo. La vocación moral brota de la iconalidad del que ha sido creado a «imagen de Dios», para reproducir los rasgos del que es icono del Dios invisible. Tanto las normas como el juicio de la conciencia orientan al cristiano hacia el descubrimiento y realización de unos valores que, por ser humanos, han podido ser asumidos e iluminados por el Evangelio.
Tanto la historia de la Teología Moral en el breve recorrido de la concilio Vaticano II y la literatura bíblica, han evidenciado la estrecha vinculación existente de hecho entre la confesión de la fe y el comportamiento humano responsable. Toda experiencia religiosa implica unas pautas de comportamiento de la vida dentro de un ambiente santuario como la vida profana fuera de ese lugar.
En este mundo secularizado se ha llevado al reducto de lo sagrado que parecía ser la ética. Por tal razón urge preguntarse por la relación fe y ética y sus implicaciones en la religión en los siguientes punto.
Como religiosos, que vivimos nuestra fe y asumimos compromisos moral a nuestro hacer ¿qué es lo que se nos confía a nuestra custodia universal y compartida? ¿Cómo dar respuesta ante la secularización y relación del hombre con el mundo entre las dificultades globales?
1.
FE Y COMPROMISO EN EL MUNDO
La relación fe-obras o la implicación verdad-amor constituyen una pregunta, siempre urgente y siempre inevitable en la historia de la Iglesia.
Todo ha sido problemático queriendo traducir la fe a los comportamientos y actitudes del mundo.
• El análisis de la misma actitud antropológica del creyente y del acto de fe nos revelan que la persona que deposita en otra su confianza vive por ello mismo una profunda relación bidireccional: descansa en ella, poniendo en ella un fundamento, siquiera sea parcial, provisional y frágil, de su propio existir, es decir, de su propio existir así. • Creer en alguien, confiar en alguien • Creer en un grupo social significa
• El recurso a los textos fundamentales de las religiones y en concreto los que fundan la tradición cristina, contribuye a esta implicación del compromiso práctico del creyente • Mc 1, 15: metanoiete; tradición paulina; en la teología joánica; en el Apocalipsis; Tradición parenética • Los testigos de las tradiciones cristianas primitivas han tratado de insertar los ámbitos de la praxis en el foco de proyección de la fe que orienta a la conversión, con eso creían ser fieles a sus raíces como a sus acontecimiento.
• La misma concepción bíblica de Dios exige un determinado comportamiento. Su esencia es su presencia.
Solo desde la acción se puede pensar a Dios. • La decisión de la fe ha de ser comprendida como una aceptación del acto y el objeto de la revelación que de forma gratuita se nos hace accesible en Jesucristo. • Por la fe, el hombre somete completamente su inteligencia y su voluntad a Dios. • Hay que restablecer una alianza entre la Teología dogmática y la Teología moral.
2. LA MORAL EN LAS RELIGIONES TODAS LA RELIGIONES HAN TRATADO DE EXIGIR DE SUS FIELES UN RECTO COMPORTAMIENTO MORAL CON LA FE QUE SE VIVE Y PROFESA
RESPONSABILIDAD MORAL DESDE LA NECESIDAD DE LA OBEDIENCIA A UN MANDAMIENTO DIVINO REVELADO POR UN PROFETA.
EL MAL MORAL CONSISTIRA PRECISAMENTE EN LA RUPTURA DE ESE ORDEN ES DECIR EN LA SACRALIDAD CICLICA Y RECURRENTE DE ESA NATURALEZA
LA EXPERIENCIA RELIGIOSA COMPORTA ASPECTOS: NOETICOS, RITUALES, ETICOS Y SOCIALES. DONDE LO SAGRADO SE OFRECE COMO DADIVA Y EN LA PRÁ|CTICA SE DAN POR SEPARADOS EN LA CONCIENCIA PERSONAL Y SOCIAL. EJEMPLOS QUE EN REALIDAD SUBRAYA LA PRESENCIA DE DIOS.
EL NOMINALISMO: CREE QUE LAS ACCIONES HUMANAS NO SON BUENAS EN RAZON DE SU ESTRUCTURA.
DOCTRINA DE LOS REFORMADORES: CONCEDE UNA GRAN IMPORTANCIA A LA VOLUNTAD DE DIOS.
EN EL MUNDO GRECOROMANO, LA RELIGION ES CONSIDERADA IMPORTANTE DE LA PRÁCTICA DE LA VIRTUD DE LA JUSTICIA
3. DIFICULTADES GLOBALES La reducción de la ética de la experiencia religiosa lleva al olvido de otros aspectos: fidelidad a los contenidos noéticos, sobre los símbolos de la fe, y riqueza de los aspectos simbólicos y celebrativos
SECULARIZACION DE LA ETICA El término secularización designa un fenómeno históricosocial-cultural.
Relación del hombre con el mundo
El hombre se autocomprende como constructor y fabricante autónomo de la realidad
CRITICA DE LO ABSOLUTO La secularización lleva consigo la desacralización de lo falsamente considerado como sagrado, esto ha traído alergia hacia toda ideología con pretensiones de lo absoluto.
muchas de las críticas de la secularización se deben a la conciencia de una falsa autonomía que desencadenado la secularización, como sistema globalizado.
LA ÉTICA CRISTIANA ANTE LA SECULARIZACIÓN
Justificación ética de nuestra praxis, ya no en el más allá, sino en actuaciones racionales.
Son los fermentos de
postmodernidad, como esquema de pensamiento, justificación del comportamiento. La moral debe ser estudiada al modo antiguo, sino también como un estudio epistemológico.
No es un defecto del entendimiento, sino en la falta de decisión y ánimo para servirse con independencia de él, sin la conducción de otro.
4.1 Ética cristiana y pluralismo ético.
Dada por la pluralidad de sistemas éticos con los que entran en dialogo los cristianos.
Nueva situaciones que presentan la necesidad de pensar y articular otra teología moral para gentiles, nuevo dialogo con las éticas seculares.
Los países en misión están llamados, por la fe cristiana que profesan a dar razón de sus comportamientos morales en comparación con otras creencias.
4.2 Entre el positivismo y el naturalismo.
Se refiere al origen y fundamentación de los valores únicos o superiores.
Moral de la autoridad y obediencia se da por un nominalismo exacerbado.
Otro sería la apelación a una naturaleza humano común e invariable, como base para el encuentro ético. Al parecer es una visión reduccionista.
Esta naturaleza ofrece una base previa a la Revelación.
4.3 Especificidad de la ética cristiana. El signo. Redescubrir valores que están fuera del campo de acción del Evangelio, es decir, que hay otros que comparten nuestra visión de mundo.
No se pueden monopolizar los valores, pues son patrimonio de la humanidad.
La ética cristiana sigue el modelo de autonomía teónoma.
La ética cristiana incorpora los valores éticos, como obvios, razonables y posibles, al mismo tiempo es consciente, tomada en su totalidad que, esta ética es, con igual certeza, lo imposible por cumplir del hombre (utópico y escatológico).
4.4 Aplicaciones concretas y normativas Reflexiones sobre la historia .
Aplicación a la vida cotidiana: Es insustituible la revelación de Jesucristo, la mediación normativa del magisterio de la Iglesia
En el ritmo de la historia y su cultura se puede comprender al hombre y sus posibilidades de acción.
Lo mismo podría decirse sobre la fe, cuya proyección, se da en el ámbito concreto de la praxis ética.
Perspectivas. Diversidad diacrónica y sincrónica seda por la escucha y fidelidad al Dios que sigue hablando en la historia, y no por simple capricho oportunista.
Como esquema normativo, contrario y opuesto a cualquier vestigio de monismo moral de raíz teológica y/o también como la convergencia de las exigencias mínimas aceptables en una sociedad plural a partir de las diversas cosmovisiones coexistentes o confluyentes.
Es inevitable la apelación a la ética civil, común a creyentes y no creyentes, en el mundo pluralista que camina hacia la secularización, por los avances que aporta esta.
3.1 Secularización la sobre un mismo contenido semántico de Es difícil ponerse dede acuerdo expresión ética civil. Para unos será civismo (comportamiento ética lasocialmente aceptado); para otros es un sistema deontológico profesional.
Dialogo
Mensaje moral cristiano debe establecer sus aspectos fundamentales frente a otros modelos.
En el marco de una ética civil, basada en valores y normas consensuadas, y son dominantes en un determinado momento histórico.
5.1
Hecho axiológico consensuado y regulado por la legislación para que la sociedad plural pueda funcionar de forma pragmática y humana En la modernidad, el hombre se auto comprende como constructor, fabricante autónomo de la realidad. Por lo que se debe repensar el hecho de la convivencia diaria.
Exige un compromiso decidido en el diálogo, frente a las pautas de comportamiento, que se vinculan con la fe, con lo político, que lleva a una reflexión del papel ejecutante en la historia.
Los problemas no son ni teóricos ni prácticos sino que la ética civil propone positividad de la norma para superar las dificultades, favoreciendo la creación de un estado de derecho. Señalando que esta ética tiene un carácter reduccionista (parcelar) al ser humano.
A pesar de muchas cautelas, las leyes se revelan con mucha frecuencia como incapaces de orientar a los hombres y las sociedades hacia un comportamiento responsable.
Tomar en cuenta: lo valioso,
y liberador de las conciencias de las mayorías (ciudadanas).
Es decir, defender lo primario de lo secundario
(hombre vs. normas); =
(Fe vs. Moral).
Se apela a la ética civil que vinculé la dignidad de los seres humanos.
Por lo tanto no se debe plantear en términos anti cristianos, porque aunque subraya cierto grado de autonomía, se debe suscitar el encuentro entre los principios de fe y la razón, formulando así principios de convivencia, sin presiones ideológicas, es decir para caminar en la libertad.
Así la secularización entra en el campo de la ética.
6. EL PAPEL DE LA MORAL REVELADA Si la razón humana, reivindicada por la ética civil, puede llegar al descubrimiento de la dignidad de la persona humana y su normatividad natural:
¿Qué papal le queda a la moral reservada?
1.
Una pregunta importante
Siempre se pregunta en la posibilidad de un a Dios por la vía de la razón y por la revelación.
El catecismo dice: el hombre necesita ser iluminado por la revelación de Dios, no solamente acerca de las “verdades religiosas y morales”. La moral revelada podrá y deberá reconocer en las exigencias de la ética racional el destello de la sabiduría de Dios y su proyecto en el mundo y sobre el hombre. Es un condigo que excluye.
• Ante la responsabilidad moral del comportamiento humano: Jesús y el joven (Mt 19, 17) •
Apoyatura trascendental. Jesús y el Joven (Mt 19, 21).
• Podrá ofrecer la confesión de su fe en Jesús el Cristo-que supere la obligatoriedad moral extrínseca. • Deberá someter a discernimiento los planteamientos formulados por la ética racional, de los valores humanos a los que dice servir, hay que purificarlos con la palabra.
2. Una oferta de transcendencia La moral cristiana se presenta ante las éticas seculares:
•Alentando cualquier proyecto ético que acepte el valor del ser humano, para ser prácticos. •Criticando proféticamente los proyectos éticos que terminan por infravalorar la dignidad de la persona •Ofreciendo una base de discernimiento para los verdaderos valores humanos y de rechazo ante los valores deshumanizadores.
•Proponiendo utopías globales que orienten la acción común de los hombres y las sociedades hacia un mundo mejor •Colaborando estrecha y cordialmente con las propuestas y lo sistemas éticos que propugnen los valores humanos, como la vida, la igualdad, la justicia, la libertad, la verdad y la paz.
En resumen, no es escandalosa la afirmación de que el cristianismo no aporta un contenido moral categorial distinto del que ofrecen sus motivaciones específicas, como el carácter trascendental y la intencionalidad cristocéntrica de las opciones ética
7. ICONALIDAD Y FUNDAMENTACIÓN DE LA MORALIDAD. O
Se podría decir que la fe acepta normatividad misma del ser humano y de su última verdad. La fe propone su propia concepción: el hombre es, por su creación, imagen de Dios y está llamado a reproducir en la vida a Jesús, el Cristo, imagen e icono definitivo de Dios.
O
Se ha tomado el tema de la imagen de Dios para fundar las exigencias éticas del respeto al hombre y a la promoción de la justicia.
O
Siendo cada hombre realmente imagen visible del Dios invisible y la exigencia absoluta de justicia y de amor que es propia de Dios (3° sínodo de obispos).
O
Esta iconalidad en la doctrina de Juan Pablo II (Redemtor hominis) relaciona el Gen 1, 26 y el Sal 8, 6.
O
En Sollicitudo rei sociales, es donde el tema de la iconalidad juega el papel de piedra fundamental para el edificio ético. En la encíclica Catesimus annus, invoca estos términos, que se aplicaban a la teología moral.
Toda la resonancia ha recibido el nombre de Catecismo de la Iglesia Católica en su partes: •La creación del ser humano a imagen y semejanza de Dios, su capacidad para acoger la revelación (36, 41), su dignidad personal (225) su señorío en la creación (356357). •La iconalidad retorna en la explicación del sacramento del matrimonio (1602, 1604, 1604).
•Importante: la Iconalidad Cristológica, dedicada a la vida moral del cristiano (1700). Dignidad por igual (1702). La iconalidad creatural (1705, 1712)
Cristo manifiesta su amor y descubre la grandeza del hombre ( GS 22, 1) Imagen de Dios invisible (Col 1, 15; cf. 2 Cor 4, 4). •La petición del Padre nuestro. El ser humano (Gn 1, 26), coronado de gloria (Sal 8, 6), que por el pecado ( Rm 3, 23), restituye al hombre (Col 3, 10) (2809). •Veritatiis splendor. •La Iglesia cree, el hombre redimido por Cristo y santificado por el Espíritu tiene como fin la alabanza a lo divino en sus acciones humanas (VS 10)
El hombre, imagen de Dios sujeto de la moral. Conclusiones relativas a la responsabilidad moral de la persona y su puesto que ocupa en la estructuración de la moral cristiana. a)Las tradiciones bíblicas no han pretendido esbozar un análisis metafísico de la esencia del hombre, entidad como operatividad. La iconalidad constitutiva, se haya de reflejar en un determinado comportamiento triplemente referencial. El ser humano: como imagen de Dios que se encuentra con otros seres humanos, que tienen el mismo valor que él. b)La antropología de la iconalidad nos recuerda que el hombre no es puramente una realidad sagrada, pero tampoco profana (DS 806). Reconocer la finitud y la ley de gradualidad. El hombre no es ajeno a lo divino. El hombre, imagen de Dios de la moral.
El otro es siempre un rostro: absoluto, condicionado, situado e interpelante. En la práctica es difícil fundamentar el deber ético: “Si Dios no existe, todo está permitido” (No) Se busca resaltar: la racionalidad, capacidad de autodeterminación, capacidad de producción de bienes materiales, de amar, entre muchas ventajas del hombre. Las asunciones categoriales son inmediatamente descalificadas en la práctica: La racionalidad es puesta en tela de juicio a cada instante. El hombre y la categoría de persona son reducidos a categorías biológicas, o instrumentales.
8. CONCLUSIÓN Un misterio radical que se resiste al dejarse degradar al nivel de problema. Misterio en su carácter sagrado. Una sacralidad que no es un obstáculo para su profanidad. El hombre es un obstáculo relativo: un ser Dos finitamente, tensivamente, como lo describe X. Zubiri. La forma de ser humanamente Dios es serlo deiformemente. El hombre es una proyección formal de la propia realidad divina; es una manera finita de ser Dios. La intrínseca e inabdicable religación del hombre a Dios, lo llevaría a ver los rostros concretos en los que deberíamos reconocer los rostros sufrientes de Cristo, fundamento imprescindible para la ética cristiana (Puebla). ¿Por qué ha de ser respetado el ser humano? La experiencia inmediata solo acierta a la ver en él, otro compañero y con frecuencia un enemigo. Desde esa creencia y esa fe, la ética cristiana profesa y testimonia una oferta de motivación trascendental que señala su especificada: ese mismo hombre, respetado y acogido por las éticas seculares como imagen y semejanza de Dios.