Cómo quitarle la carne a un esqueleto animal Quitarle la carne a un animal te permitirá ver su esqueleto para colocarlo de la manera que quieras hacerlo. Extraer la carne es un proceso largo que requiere mucha preparación y una larga espera. La carne literalmente se pudrirá en los huesos durante este proceso, así que asegúrate de hacerlo en una zona rural donde haya el menor número de personas posible. Consigue el permiso de los vecinos antes de realizar este proceso. Asegúrate de que el cadáver esté protegido para evitar la interferencia animal. Consulta las leyes locales para asegurarte de que quitar la carne sea legal en tu área. Instrucciones 1 Usa tu cuchillo para desollar para quitar la piel del animal. Utiliza el bisturí para extirpar partes delicadas como los ojos, los músculos de las mejillas, la lengua y el cerebro. Empuja una sonda a través del cráneo en la parte superior de la cabeza y debilita el cerebro. Succiona el cerebro con una jeringa. 2 Corta tantas capas de músculo como sea posible con tu cuchillo. Deja de cortar los músculos cuando no se despeguen fácilmente con el cuchillo. Elimina los órganos internos que son más difíciles de pudrirse, tales como el corazón, pulmones y la vejiga. Bótalos en una bolsa de plástico sellada. Guarda el cadáver del animal en un congelador hasta que sea verano. 3 Llena un recipiente grande de metal hasta alrededor de un octavo de la altura de agua. Pon el contenedor en algún lugar elevado para que los animales no puedan molestarlo. Coloca el cadáver del animal en el contenedor, sella la tapa y coloca un bloque de cemento grande sobre él para evitar la perturbación. Abre pequeños agujeros en la parte superior del recipiente para permitir que entren el aire y los insectos. 4 Coloca las larvas o huevos de insectos en el interior del recipiente. Los gusanos descompondrán la carne del animal muerto, dejando los huesos intactos. Usa escarabajos para obtener los mejores resultados. 5 Revisa el cuerpo con regularidad para ver cómo está progresando. Continúa agregando agua para ayudar a que los gusanos lo descompongan. Añade larvas de insectos nuevas si las que pusiste maduraron y se convirtieron en insectos. 6 Escurre el agua en el balde y bótala en una bolsa de basura sellada cuando el esqueleto esté listo. Vierte el desinfectante en el recipiente y deja que se escurra en una bolsa de plástico sellada. 7 Ponte los guantes de goma y retira con cuidado el esqueleto. Límpialo con agua para eliminar los gusanos o la carne que quede colgando. Utiliza un cuchillo de cocina romo para eliminar las piezas más difíciles de la carne.
Limpieza y montaje de un esqueleto Después de las vacaciones de Navidad para desentumecer las neuronas y recuperar la habilidad de nuestros dedos hemos diseccionado el ala de un pollo y la paletilla de un conejo. El objetivo era doble, recordar los huesos que forman parte de las extremidades anteriores de estos dos vertebrados y montar los esqueletos de estas estructuras, manteniendo la posición normal que presentan en el organismo. Como siempre, antes de empezar, unas fotos de los “conejillos de Indias”.
Y como no, de los expertos cirujanos que diseccionaron a los dos animales.
Podéis ver más fotografías en el siguiente albúm de Picasa. Como en las demás prácticas, podéis obtener el guión de la misma en el siguiente enlace: LIMPIEZA Y MONTAJE DE UN ESQUELETO_PRACTICA El proceso ha sido lento, limpiar los huesos, lavar con alcohol, blanquear con agua oxigenada,…. pero el resultado ha sido excelente. En estos dos fotografías podéis ver el inicio y el final de la práctica.
Recordad que los resultados de la práctica deben incluir al menos:
una foto del montaje que habéis realizado con las estructuras entregadas (ala de pollo y pata anterior de conejo), identificando las estructuras que en ellas aparecen. respuestas de las tres cuestiones que aparecen en el guión de la práctica.
Me he dedicado mucho tiempo a preparar esqueletos y sobre todo cráneos cuando estudiaba la carrera, así que del tema entiendo lo suyo. Lo normal es intentar retirar toda la piel que se pueda con el animal fresco (o descongelado) y después cocerlo (huele que da asquito por lo general), retirar toda la carne que se pueda y después aclarar el hueso con agua oxigenada. Lleva tiempo y es engorroso, pero los resultados son bastante buenos. Ah, una vez aclarada el agua oxigenada y con el esqueleto bien seco, puede ser interesante barnizarlo o aplicarle algo de pegamento en determinadas zonas para que no se rompa al manipularlo (lo mejor es hacerlo en las partes menos visibles, pero a veces es difícil), Otra opción es enterrarlo para que el tiempo haga lo que tenga que hacer, ponerlo en un hormiguero suele funcionar o si el animal es pequeño ponérselo a los tenebrios (tengo algún cráneo de Anolis limpio en 24 h. gracias a ellos). Pero tú ya lo has deshidratado con el formol, así que igual debes hidratarlo primero manteniéndolo en agua durante bastante tiempo y con cambios frecuentes. El problema es que al haber estado en formol la carne se habrá pegado al hueso bastante y te costará desprenderlo. Mi consejo, si sólo quieres la cabeza, es que la separes, la rehidrates y la entierres. En este caso será lo mejor. Ah, como consejo general. No uses formol, usa alcohol 96%, de los de farmacia. Aparte de mas barato, huele menos y es más saludable para tí. Además el color es mas transparente.
TÉCNICAS PARA LA PREPARACIÓN DE ESQUELETOS TÉCNICAS COMUNES PARA LA PREPARACIÓN DE ESQUELETOS.
Antes de elegir un método al azar, debe saberse que las técnicas que a continuación se exponen no dan todas los mismos resultados. Aunque el objetivo de éstos métodos es quitar la carne del esqueleto el grado de eficiencia varía.
Si está interesado en montar el esqueleto en una base o una caja de exposición cubierta de vidrio, la técnica es como sigue: a) Quite la carne y desarticule como se indica más abajo, b) quite la grasa, c) Blanquee, d) Monte.
Quitando la carne:
Cuando se trabaja con peces grandes, corte a través de la piel y saque las vísceras.
Quite la piel y músculos de los lados del cuerpo donde no haya estructuras esqueléticas.
Una cuestión muy importante, identifique primeramente la especie del ejemplar que preparará. Con reptiles más grandes, aves y mamíferos, sobre todo éstos últimos, tenga mucho cuidado en quitar el tejido muscular en el lugar de origen e inserción, cuidando de no destruir los ligamentos que conectan los huesos. No pierda de vista los pequeños huesecillos, como las rótulas de las extremidades posteriores. Quite el cráneo cortando cuidadosamente los ligamentos entre este y el atlas. Limpie el cerebro con una cuchara para cráneos o con una aguja hipodérmica. Quite los ojos y pedazos grandes de músculos de mejilla, pero cuide de no quitar las proyecciones óseas del cráneo. En especímenes más grandes quite los órganos de la caja torácica y la carne de entre las costillas, cuidando no cortar el cartílago que une a las costillas con el hueso del pecho. Técnica de hervir y limpiar. A pesar de que muchos Mastozoólogos limpian los cráneos o esqueleto por éste método, causa más daño a los huesos y conexiones ligamentosas que cualquier otra técnica. La superficie de los huesos se hace porosa, las suturas tienden a aflojarse y los dientes a caerse. Para usar ésta técnica, simplemente hierva los especimenes hasta que la carne se afloje del hueso. Quite la carne, seque bien el esqueleto y cúbralo con aerosol plástico claro para reducir la porosidad de la superficie de los huesos. Maceración en agua. Si se necesitan esqueletos no ligamentados, simplemente limpie el material esquelético después de quitar la carne, en agua fría y déjalo a temperatura ambiente durante 20 o más días, hasta que la carne esté bien podrida y separada de los huesos. Tire los contenidos líquidos, cuidando no perder ninguno de los pequeños huesos. Después de secar quite la grasa y blanquee. La técnica para preparar esqueletos con ligamentos para montarlos después se menciona a continuación, está tomado de Turtox Service Leaflet No. 9 1958. “Ponga los huesos en un recipiente de vidrio o porcelana de tamaño conveniente y cúbralos con agua de la llave (nunca use ácidos o sustancias químicas de cualquier tipo), no permita que entre ninguna sustancia extraña (metal, madera, etc.) al recipiente, ya que esto decolora los huesos. El recipiente se debe mantener a temperatura ambiente y el agua se debe cambiar diariamente, al principio se notará mucha sangre en cada cambio, pero esto disminuirá mientras se vaya desprendiendo los huesos de la carne. Durante este tiempo se está llevando a cabo la acción bacteriana sobre la carne. Cuando el agua se ve clara, tirela y ponga los huesos en una solución de una onza de fosfato de trisodio por cada galón de agua. Mezcle bien hasta que el trisodio se disuelva, deje los huesos en esta solución durante 12 a 24 horas. Este baño tiene un doble propósito, el de poner fin a la maceración y el de aflojar e hinchar el tejido que queda en los huesos. Para limpiar saque los huesos de la solución de fosfato de trisodio y déjelos escurrir.
Prepare un cepillo de cerdas duras, agua caliente y cal clorinada, sumerja el cepillo en agua caliente, después en la cal clorinada. Cepille los huesos con movimientos cortos y rápidos. Esto provoca una acción que quema a los tejidos adheridos a los huesos y causa su desaparición. (Por precaución se recomienda el uso de guantes de plástico durante la operación) Enjuague con agua fría frecuentemente cepille hasta que haya quitado la carne pero no los ligamentos que unen los huesos, finalmente enjuague con agua fría y seque a temperatura ambiente.” Métodos para remover grasa No es costumbre quitar la grasa a esqueletos y cráneos pequeños a menos que se piense usarlo para exposición o estudio. En huesos más grandes se deberán hacer varios agujeros en el eje de la cabeza para permitir que entre la solución desgrasadora. Se utiliza Tetracloruro de Carbono para desgrasar, aunque la gasolina blanca representa un buen sustituto (más recomendable). Los solventes son volátiles y por lo tanto el recipiente debe tener una proporción de área de superficie muy pequeña, debe haber buena ventilación y se deben usar guantes de hule, evitar aspirar y que se acumulen gases, ya que estos son explosivos. Los especímenes deben permanecer en el recipiente entre unos días a unas semanas dependiendo el tamaño y la cantidad de grasa que contenga, se elimina la grasa flotante frecuentemente. Seque los huesos al aire. Técnica para limpiar y blanquear Los especímenes esqueléticos que se han ensuciado por el uso continuo, deberán ser lavados con agua tibia y detergente. Después de esto, enjuague con agua y seque. Si los huesos siguen manchados, pueden ser blanqueados en una solución al 5% de Tetracloruro de Carbono. Si es posible, sumerja los huesos en la solución. El material recién limpiado, requerirá hasta 10 horas para quedar blanco. Enjuague bien y seque los huesos. Montaje de esqueletos Si va a montar los esqueletos es recomendable la técnica de maceración en agua, ya que los esqueletos desarticulados deben unirse con pegamento o alambres y generalmente quedan más débiles. Los esqueletos pequeños por lo general se montan en cajas con tapas de vidrio y los más grandes en bases de madera. Es recomendable tenar siempre a la mano un esquema del esqueleto del espécimen a montar, para no perderse con los huesos pequeños Preparación y Montaje de Esqueletos Maceración: después de limpiar las vísceras y partes carnosas procede a preparar el esqueleto limpiándolo en un recipientes por el que circule el agua para que salgan las materias que se desprendan de los huesos. Hay maceración en agua fría y maceración en agua tibia y caliente Blanqueamiento de huesos: para este proceso existen multitud de procedimientos, el más fácil consiste en bañar la osamenta en agua oxigenada al 10%. Luego se someten a la acción del sol hasta que queden totalmente secos. También se puede utilizar la opción de macerado y blanqueo conjunto, que se componen de carbonato de sosa 125g, cal viva 30g, agua en ebullición 2,5 l. No debes utilizar nunca para el blanqueado compuestos de cloro pues dejarían los huesos porosos, tampoco se debe utilizar formol ya que este descalcifica con el tiempo. Desengrasar : antiguamente muy usado, ahora es muy controversial, la grasa es parte del hueso, el proceso se trata de abrir un hueco en el hueso y con la ayuda de solventes, como el
jabón en barra y/o gasolina se deja macerando. Estos métodos sacan la grasa pero dejan el hueso sin información química, sin la grasa el hueso se ve más bonito pero es más frágil, por lo que no se recomienda. Se puede limpiar la superficie del hueso con alcohol al 96% cuando se necesite. Cráneos de Mamíferos: se corta detrás de los cóndilos occipitales, se remueve cuanta carne y cerebro sea posible, con un cuchillo. Remoje en agua durante una semana o hierva a fuego lento, se remueve la carne sobrante (hervir puede quebrar dientes caninos y otros). También se puede enterrar el cráneo y dejar que las hormigas y escarabajos terminen de limpiar. Una vez que este limpio puede ser blanqueado al sol o con peróxido de hidrogeno al 3%(agua oxigenada). Limpieza Mientras más seco sea el proceso es mejor, se debe hacer en un lapso muy corto de tiempo, con la menor cantidad de reactivos. Asegúrese que es necesario el proceso de limpieza, El agua al interactuar con las proteínas y minerales del hueso le causa daño e inestabilidad a este, sin embargo hay huesos que tal vez lo necesiten como los de exhibición. Hay que tener en cuenta precauciones como, si se utilizan soluciones acuosas no se deben dejar mojado los huesos, si se utilizan enzimas se deben neutralizar después de reacción.
Una forma de descarnar y desengrasar a la vez, se consigue poniendo las piezas en vasija de plástico coo una mezcla a partes más o menos iguales de peróxido común (agua oxigenada + amoniaco). La reacción se refuerza espectacularmente. El tiempo a emplear depende de las piezas óseas a preparar. Si se trata de huesos o ejemplares mayor que un pollo, se aconseja someter todo a una maceración "anaerobia" (con bacterias que no necesitan oxígeno). Esto se realiza en un bidón de plástico con buen cierre, en el que se pondrá agua de lluvia o de rio limpia y sin cloro,- colgar las piezas dentro de una maya de plástico. (nada de metal y mucho menos de hierros), aseguramos así que los huesecillos no se nos vayan al fondo y se nos vayan perdiendo; dentro de este bidón y dentro del agua, metemos unos restos de pescado o algo parecido que ya empiece a "cantar" = oler. Señal de que abundan las bacterias requeridas.
Cerraremos el bidón o recipiente y nos olvidamos de él durante una temporada larga unos dos meses y en un lugar sombrío y fuera de casa (no al sol ni a la luz). Las bacterias formarán una telilla blanca en la superficie del agua del recipiente (señal de que la cosa funciona). Cuando vayamos a sacar la bolsa de maya con el contenido óseo, tenemos que estar seguros de que hasta la grasa ha sido metabolizada por las bacterias. Si los huesos eran grandes, antes de empezar el proceso, se les practica un orificio cerca de los sendos extremos para facilitar a las bacterias el al tuétano de los mismos. El Proceso siguiente es agua limpia en abundancia y alguna forma de cortar el proceso. Formas que yo empleo: a: sol y sereno nocturno. b: Un desinfectante que no coloree c: agua oxigenada aplicada con un pincel o algo parecido. OJO NO EMPLEAR LEJÍA QUE SE COME EL CALCIO. CON LA PRACTICA SE PUEDEN ADQUIRIR NUEVAS FORMAS. BARNIZADO FINAL: Una vez secos, oreados y blanquitos, podemos realizar un barniz fabuloso y barato. BARNIZADO:INGREDIENTES:ALCOHOL COMÚN - TIZA O BLANCOESPAÑA (POLVO DE CARBONATO DE CALCIO)- UN TRAPITO BLANCO DE HILO. PROCESO: Se moja el trapo un poco en alcohol envolviendo con el mismo dos dedos de la mano y retomando cada vez un poco de la tiza deshecha en polvo y que tenemos en un platillo a mano, frotamos con energía la superficie ósea y veremos el brillo que adquiere de forma inmediata. CREO QUE CON ESTOS PASOS EL TRABAJO QUEDARÁ PERFECTO.¨(NO AÑADIR PINTURAS O COLORANTES QUE DESVIRTUAN EL HUESO.)
como preparar huesos para estudio
Dentro de cada paso es posible que existan varios métodos diferentes; trataré de explicarlos todos, así cada uno puede elegir el que más le convenga según los elementos y/o espacio del que disponga.
Antes de comenzar, me parece útil hacer la aclaración de cómo está compuesto un hueso: 40% - Matriz orgánica. (principalmente Colágeno de tipo I; contiene um 20% de agua) 60% - Combinaciones inorgánicas. (distitntos tipos de sales de clacio) A medida que el cuerpo se descompone, nos vamos a ir encontrando con menos materia orgánica, hasta que la misma desaparece por completo.
Otras cosas con las que pueden encontrarse: - Restos de tendones, cartílago, etc. - Tierra - Ropa (no es raro que les den los huesos del pie en la media que tenía el cadáver por ej.) - Olor (y si…)
Por lo cual vamos a encontrarnos con varios “tipos” de huesos, y de esto va a depender la profundidad de limpieza necesaria: a) Huesos con abundante materia orgánica (por lo general seca, se reconoce por su color más oscuro con repecto al hueso; puede representar un tendón, cartílago, el periostio -una fina película de color marrón que se desprende fácilmente del hueso-, etc) b) Huesos con ausencia total de materia orgánica: estos tienen un color más blanquecino; en éstos transcurrió el tiempo necesario para la descomposición total de los restos orgánicos, por lo cuál estan compuestos netamente por materia inorgánica (sales de calcio y otros minerales) - Obviamente, entre a) y b) se encuentran todos los matices que se puedan imaginar.
Lo ideal sería conseguir huesos lo más cerca posible de la categoría B, ya que estos requieren menos esfuerzo al limpiarlos.
Materiales necesarios:
-Balde - Cepillo grande - Cepillo de dientes usado - Cal viva (opcional) - Lavandina - Barniz
0) Si los huesos no tienen restos de materia orgánica, podés comenzar por el paso 2.
1) Cómo quitar la materia orgánica? a) Hervirlos: Si bien este método nos asegura una buena limpieza, al realizarlo despide mucho olor, y no creo que los dejen usar la olla de los fideos para hacerlo, después quien la usaría??? a2) Una alternativa a esto es tirarles agua hirviendo y con un cepillo (grande tipo para lavar la ropa para huesos grandes, y un cepillo de dientes usado! para los pequeños recovecos) ir desprendiendo los restos. b) Cal viva: Este método parece ser el más efectivo; tiene el plus de blanquear los huesos. Se colocan los huesos en un balde y se cubren con cal viva; dejarlo unas 4 horas, o hasta que vean que se desintegraron completamente todos los restos. Es importante vigilar este proceso para que los huesos no se arruinen. SIEMPRE usar guantes, ya que es una sustancia muy corrosiva. c) Lavandina y cepillo: ver paso 2.
2) Cómo terminar de limpiarlos/desinfectarlos? Esto es lo más fácil de realizar. Este paso es importante ya que limpia, desinfecta, blanquea y desodoriza los huesos. Se coloca en un balde lavandina y agua en proporción 1/10. El motivo por el cual recomiendo diluir la lavandina en lugar de utilizar lavandina pura es reducir las posiblidades de reblandecer y/o decorticar el hueso, lo cual evidentemente lo arruinaría.
IMPORTANTE: No mezclar LAVANDINA y DETERGENTE para limpiar los huesos (ni bajo cualquier otra circunstancia). Dicha mezcla produce la liberación de un alto porcentaje de cloro el cual es un irritante cáustico dañando principalmente las vías aéreas. Además, la mezcla anula los principios activos de ambos compuestos.
Luego se colocan los huesos y se espera hasta obtener la limpieza y/o blanqueo deseado. Lo aconsejable es no menos de 2 horas, ni tampoco más de 1 día. Si decidiste realizar directamente este paso, es recomendable cepillarlos un poco, siempre teniendo la precaución de utilizar guantes.
3) Cómo secarlos? Lo ideal: dejarlos al sol 1 ó 2 días. Lo que sirve: cualquier lugar sin mucha humedad sirve (es variable el tiempo de secado) Lo más loco: secarlos en el horno (creer o reventar, conozco gente que lo hizo)
4) Cómo protegerlos? Este es un punto controversial. El método clásico es el barnizado, el cual tiene como principal desventaja el hecho de que se pueden tapar accidentes óseos no muy marcados (como ser inserciones musculares, agujeros nutricios, etc.) Ahora bien, si no los barnizamos es posible que, si son muy manipulados, los huesos no duren mucho ya que se van desintegrando de a poco. Si se deciden a barnizarlos, utilicen un barniz incoloro mate diluído con aguarrás para lograr un barniz más “corredizo”, con el cual por lo general necesitaran dar dos manos. Utilizando este tipo de barniz diluído se protege el hueso, y a su vez, se minimiza el borrado de accidentes.
AQUI MOSTRAMOS EL ESQUELETO DEL POLLO DE NUEESTRA PRÁCTICA AL QUITARLE LOS ÓRGANOS Y LIMPIARLO BIEN TUVIMOS LA OPORTUNIDAD DE CONSERVAR SU ESQUELETO. PARA PODER LOGRAR ESTO:
Lo que resto del pollo lo pusimos a hervir en agua.
Al quedar hervido, lo sacamos y esperamos a que se enfriara un poco.
Después procedimos a quitarle la carne poco a poco.
Las extremidades de las alas y las patas las separamos y las limpiamos a parte.
Lo que es la caja o donde se encuentran sus costillas lo tuvimos que hacer junto para evitar quitarle las costillas.
Lo que fue el pescueso también se hizo a parte porque este tiene carne y ligamento por dentro.
Tuvimos que ponerlo en cloro y agua por algunos días y dejarlo secar un día.
El proceso se dio en 2 semanas hasta juntar nuevamente los huesos y tener solo el esqueleto de pollo.
Al finalizar se le aplico barniz en aerosol para su conservación.