Carta a un enemigo. "Estimado enemigo. Te sorprenderá que te escriba estas letras, y más aún cuando te diga que lo hago con la intención de darte las gracias, pues no te puedes imaginar la cantidad de cosas que he aprendido de ti y quiero agradecértelo. ...Con tu envidia hacia mi me has enseñado a no tener envidia de nadie, a que me conforme con lo que tengo. Con tu odio he aprendido a amar a los demás. Puedo asegurarte que se está muy feliz así, en serio. Además, he visto los efectos que la envidia y odio generan al cabo de los años en las personas que lo padecen y, sinceramente, no quisiera acabar así. Jamás me lo pusiste fácil, y te lo agradezco triplemente, porque así me has hecho más fuerte: me has enseñado que no se consigue nada sin esfuerzo. Sin tu proponértelo has logrado que aspire a convertirme no tanto en un hombre de éxito -lo cual es algo fugaz y pasajero-, sino en un hombre de valor, que es un algo mucho mas importante e imperecedero, cosa que estoy descubriendo con el paso de los años. A pesar de ti, y de otras personas como tu, aquí estoy, pues me has enseñado el valor de la lucha diaria. Y eso es de agradecer. Además, con tus continuos intentos de desacreditarme, has logrado que vea la luz: has conseguido que respete a mis compañeros, me has enseñado a no desacreditar a nadie y sobre todo a tener claro que, si bien es cierto que cuenta la opinión de los demás, lo que más ha de contar es lo que uno mismo piense de si. Con tu soberbia me has enseñado la luz de la humildad. Y fundamentalmente, tambien he aprendido a distinguir a amigos de enemigos, porque te digo que, por astuto que uno sea, al que es enemigo se le ve el corazón en los labios. Pero lo que más te agradezco es la fidelidad de tu enemistad. Se que es una enemistad sincera, sin mezcla de traición. Por eso prefiero tu compañia antes que la palmadita del traidor que se pone la máscara de amigo para luego traicionarte por la espalda. Tu, al menos, te has atrevido a dar la cara, quieran los dioses guardarnos, a ti y a mi, de enemigos ocultos. Y desde luego, tambien prefiero tu compañia mucho antes que a los carroñeros que no sienten, y que se limitan a estar todo el día viendo como caen las cabezas de las demás, igual que hacian muchas mujeres en el París de la Revolución, cuando se sentaban a hacer punto esperando que el verdugo hiciera correr la guillotina. Termino ya.ES X ELLO QUERIDO ENEMIGO..DOY GRACIAS X HABERTE CRUZADO EN MI CAMINO... No pienso vengarme de ti, no merece la pena, de modo que tranquilo, le dejo ese cometido a la vida. Los dioses te guarden, y a mi no me desamparen."TE DEJO MIS CARIÑOS..SALUDOS..GRATITUDES..Y X SUPUESTO MIS RESPETOS..DE LOS CUALES ERES MERECEDORES..GRACIAS A TI E APRENDIDO..QUE NADA SE FORJA EN ESTA VIDA..SIN FE..AMOR..HUMILDAD..TOLERANCIA..PAZ..ARMONIA...Y FORTALEZA..DESDE YA MIS MEJORES DECEOS PARA TI MI QUERIDO ENEMIGO!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!